Carmina y Aníbal
Cuento / 2 de noviembre de 2024

La cocina del escritor.— Una amiga me envía por Telegram las bases de un concurso que convoca un municipio de Asturias sobre la celebración de no sé cuál de los días de la mujer que las comadres han ido estampando a lo largo del calendario: el día de la mujer, el de la mujer trabajadora, el día de la madre, de la mujer maltratada, día de la profesora, de la mujer homosexual… En las bases se pedía un microcuento de máximo dos páginas (!!). Cualquiera que tenga dos dedos de literatura sabe que dos páginas y microcuento es un desafortunado oxímoron y un ignorante sinsentido. Pero deja que te cuente… Sobre el formato del cuento, las bases estipulaban que debía enviarse un archivo PDF con un tamaño de letra dado y un MÁXIMO DE DOS PÁGINAS. Terminado el cuento veo que tengo tres páginas… Me pongo a reducir texto y no puedo bajarlo de dos páginas y media. Releo las bases y no habla de márgenes ni de interlineados… Los reduzco sin perjudicar la legibilidad, pero como el cuento es puro diálogo, las frases cortas siguen ocupando una línea completa y no logro bajar el cuento de las dos páginas y cuarto… Y…

Barbarismos y solecismos
Cuento / 1 de octubre de 2024

La cocina del escritor.— Este minicuento se me vino a las mientes observando el mundo. El razonamiento que le da forma es: yo te respeto como persona pero no me puedes exigir que respete tu locura. Puedes percibirte como te dé la gana siempre y cuando no genere ninguna obligación hacia mí. Es curioso que las personas que utilizan estos artificios –y quienes les amparan y defienden– exigen tolerancia mientras ellos se vanaglorian de su intransigencia. Si no me apetece entender la locura ajena, ¿no tengo tanto derecho a expresar mi opinión como la tienen ellos? ¡Ah!, que hiero sus sentimientos. Pero ellos hieren los míos obligándome a comulgar con su locura, enajenación, rareza, necedad o veleidad. ¡Ah, ya! Que soy un facha… por llevarte la contraria.   Barbarismos y solecismos    ¿Cómo leer un archivo ePUB? Barbarismos y solecismos ** (cuento – 889 palabras ≈ 4 minutos) A primera hora de la tarde apenas viene nadie a la biblioteca, por lo que aprovecho para reordenar fichas y recolocar libros. Pero esa tarde, a los diez minutos de abrir, entró un chaval joven, de esos cuyo sexo es complicado de adivinar, tanto por su aderezo personal como por su indumentaria. Por el bozo sobre…

Horror en el supermercado
Cuento / 15 de diciembre de 2023

La cocina del escritor.— Mi cuento más reciente, que, tras meses de sequía cuentística, me saltó al magín ya completo a últimos de noviembre, y sólo he tenido que escribirlo. Como siempre me ocurre, es cuando veo el acontecimiento que me doy cuenta de que tengo un cuento. Sólo debo recuperar sedal hasta dar con el comienzo. ¡Pero esta vez no encontraba un comienzo definido! ¿Dónde iniciarlo? Pues retratando a los dos protagonistas. El uno ordenado, embarullada la otra. Y por supuesto me sale un tipo solitario, porque el cuento narra la historia de un acontecimiento y no la historia de los personajes. ¡Bastante que hay un cameo y cuatro quídams para poblar la narración! ;-). Horror en el supermercado    ¿Cómo leer un archivo ePUB? Horror en el supermercado *** (cuento – 1.897 palabras ≈ 8 minutos) Brais es de los últimos serenos que quedan en España. Le faltan pocos años para jubilarse. Ayer caminaba hacia el supermercado que está a las afueras del pueblo a por una compra de última hora. Estaba solo en casa, que su mujer se ha ido a la ciudad a pasar esta semana con su madre nonagenaria. Quedaba una hora para que cerraran. Ayer libraba y no…

Recogida de basura
Cuento / 12 de marzo de 2021

La cocina del escritor.— El cuento, escrito en octubre de 2017, conjuga dos historias que guardan paralelismo. Ambos acontecimientos inciden en la consideración que en realidad tienen las personas de nosotros: por sus hechos los conoceréis, una frase que se me antoja bíblica pero que vete tú a saber por qué vericuetos ha llegado a mi mente. Lo que nos dicen con la boca y cómo nos tratan con una red tejida de apariencia es una cosa, y otra muy distinta es la estima y consideración en que realmente nos tienen. Para detectarlo hay que estar atentos a visajes que se esconden tras hechos aparentemente amistosos. Lo que también es válido para la razón inversa de lo que muestra el cuento: aquello de «quien bien te quiere te hará llorar»; pero no voy a escribir una historia sobre una idea ya sintetizada en tan conocido refrán… He puntuado el cuento con una sola estrella porque no me acaba de gustar cómo se me fue plasmando, que una vez que comienzas a escribir un cuento con todo en mente, luego es muy complicado revertir la tendencia del inicio. En realidad pienso que la historia en sí merece cuando menos una segunda estrella. La lectura…

Los cuentos de Juan Norris
Crónica de actividades , Cuento / 8 de diciembre de 2020

Hace muchos meses que ofrezco la descarga de Los cuentos de Juan Norris de forma gratuita en la barra lateral del blog. Lo había subido a Amazon, pero esa plataforma no me deja regalarlo. Lo ofrecía al mínimo precio permitido de 3 euros, pero como no busco dinero con mis cuentos, acabé por retirarlo para brindar su lectura gratis desde mi blog. Coloqué la portada en la barra de la derecha como reclamo para la descarga y me olvidé del escaparate hasta que ofrecí Ciudad Perro. Entonces tuve que reacomodar la imagen en la barra vertical. Pero seguí sin prestar atención a esa vitrina (sí, lo sé, no me sé vender como escritor… pero es que en realidad no me quiero vender porque nunca me he vendido… no sé si me entiende…). Ahora es que caigo que ese libro no tiene una entrada en este blog que explique de qué trata. La tenía en esa plataforma universal, pero no en mi blog. Así que aquí va la presentación de: Los cuentos de Juan Norris Quince cuentos de un justiciero urbano que defiende sus derechos en un mundo que ha cambiado mientras él se hacía mayor. Imposible revertir el tiempo, lucha…

María Bacanesa
Cuento / 1 de diciembre de 2020

La cocina del escritor.— Un cuento del kabuki (teatro japonés) donde las fechorías de la mala quedan impunes y la chica buena sufre en silencio y logra rehacer su vida lejos de la malvada indocente. Quizá la mala, una vez le hayamos arrancado la máscara del kabuki, saliendo del cuento se vea en el escenario y se reconozca, y aún se ría de su mezquindad sin castigo. La vida esconde al monstruo deforme tras puertas decoradas de dignidad (quien se inviste de dignidad muestra su mezquindad). Protervos y aborreciblas acechan desde el hueco y se amparan en el anonimato que les da la noche, la masa o su superioridad estamentaria, y se retuercen de placer tras comprobar su obra y saberse invulnerables, quizá aforados. La única enseñanza que el bueno puede extraer es que debe apartarse de la senda cuando el malo transita por ella: triste, ¿verdad? Una historia de kabuki representada por una harpía y una niña: es el bullying del profesor al alumno, del que no se quiere hablar y los colegas de profesión amparan con corporativismos culpables. Quien pecó seguirá pecando mientras no se le imponga sanción. Entren y lean, señoras y señores: la vida misma representada en la pantalla…

No hable mal
Cuento / 1 de noviembre de 2020

La cocina del escritor.— Este cuento no puedo decir que me lo inspiró, sino que me lo sirvió una buena amiga con un enlace y la siguiente nota: «Escucha la letra». Mi cuento sólo escenifica la historia que cuenta la canción, pero esta canción no necesita de escenificaciones: es perfecta. Y como para no serlo… seis meses le llevó escribirla a su autor. Es obra del compositor mexicano Martín Urieta, y yo también debo gritar ¡Ay, Martín! junto con Vicente Fernández. En la portada de Rulo Minas aparece una imagen de Vicente Fernández, que la canta, y aunque fue su voz la que me inspiró el texto de mi cuento, al César lo que es del César: ¡Ay, Martín!, que pedazo de canción nos has legado a todos. Al final del cuento, en el epub, encontrarás la letra de esta soberbia canción y un enlace a una de las interpretaciones del charro mexicano. Y aquí atrás te dejo otra de sus interpretaciones. No dejes de escucharla… Yo estoy contento con este cuento. Pero, debo insistir hasta el hartazgo: el mérito no es mío, es del autor y del intérprete de la canción. No hable mal    ¿Cómo leer un archivo ePUB? No hable mal…

Escaleras
Cuento / 12 de abril de 2020

Me han publicado este cuento en Narrativa Breve. Usa Control+F para abrir el buscador del navegador, pon mi apellido en la caja de texto y pulsa Intro para ir a mi cuento. Es un cuentito trilero…   Escaleras (un cuento del confinamiento) * (cuento – 781 palabras ≈ 3 minutos) Con esta gaita del confinamiento, apenas camino nada. Todo el día metido en casa y trabajando en lo que me gusta frente al ordenador. Además, con las lesiones de mi edad, quizá es lo mejor para mí. Pero una de estas noches, al irme a acostar, me he visto los pies hinchados y me he asustado. He tirado de enciclopedia mental y he recordado que con el propio apoyo de los pies al caminar, la compresión que hacemos contra el suelo, regula la sangre y los líquidos del cuerpo, que son reenviados al torrente circulatorio. Bueno, más o menos. Así que me he impuesto una rutina. Como vivo en zona rural, en lo que se llama una vivienda unifamiliar, y tengo escaleras interiores en casa, he decidido subirlas y bajarlas, y de paso tonifico la musculatura inferior, incluidas las nalgas. Me he propuesto subir doce veces los escalones, que son…

El ascensor
Cuento / 15 de enero de 2020

La cocina del escritor.— Poco os podré anticipar sin destripar este cuento de noviembre de 2017. Cualquier cosa que diga es probable que os destripe una parte de la lectura. No se trata sólo de una huida angustiosa en un entorno urbano y claustrofóbico, ni de una persecución contenida. Hay algo más que habéis de descubrir leyendo el cuento o la sección La receta del cuento, donde sí que se destripa algo de la historia. Espero que os resulte ameno aunque vuestro credo no apruebe algunas acciones.   El ascensor    ¿Cómo leer un archivo ePUB?   El ascensor *** (cuento – 1.411 palabras ≈ 6 minutos) Acababan de hacer el amor en el piso de ella, una mujer casada que vivía en la quinta planta de un lujoso bloque de apartamentos de quince alturas. Estaban desnudos, jugando a las caricias en la cama, cuando sonó el teléfono. Ella se estiró hacia la mesilla para alcanzarlo mientras él observaba el bamboleo de su pecho. Eran unos pechos grandes que él había estado besando con sus manos. El gemido que ella ahogó le sacó de la ensoñación. La miró sorprendido y vio la alarma en su rostro. Ella respondía aprisa, queriendo colgar a un interlocutor…

La partida
Cuento / 1 de febrero de 2019

La cocina del escritor.— Este cuento lo he presentado a un par de concursos y no ha recibido la consideración de los jurados. Sin duda los trabajos premiados merecieron mejor suerte que el mío, pero no creo que mi cuento sea malo. Lo terminé en el mes de octubre de 2017 y la fábula no trata sobre ningún juego de mesa, aunque en él se mencionan varios de los llamados duelos, juegos de mesa diseñados únicamente para dos jugadores. El tema es el paso del tiempo durante la vida de una persona y las vicisitudes que le sobrevienen, con una lectura (creo que) entrañable, por relajar mi vis cáustica e irreverente.     La partida    ¿Cómo leer un archivo ePUB?   La partida *** (cuento – 2.437 palabras ≈ 11 minutos) (Ajedrez) Mi padre me miraba con su cabeza en alto, la espalda erguida, cogiendo distancia con la partida de ajedrez. Yo miraba las piezas con la barbilla casi pegada a la mesa donde se abría el arcidriche sobre el que se dirimía la batalla. —Si no tienes una visión del conjunto no puedes leer la partida. Me eché hacia atrás, pero mis ojos continuaban fijos en el alfil perdido desde hacía dos…