Una intervención, en el ámbito cultural, es la modificación de una obra preexistente. En las intervenciones se combinan diferentes artes: música, pintura, escultura, fotografía. No, el vandalismo no es una intervención. Se trata de tomar una obra y modificarla para enriquecerla. Por supuesto la obra original no debe resultar dañada. El concepto no es tan nuevo como podría parecer. Desde siempre se leen poesías con música de fondo o se versionan como canciones, se bailan coreografías ante obras escultóricas y pictóricas, se viste con diferentes modas al Manneken Pis bruselense, se proyectan imágenes y luces sobre fachadas de reconocido valor arquitectónico haciendo uso de las nuevas tecnologías y el público aplaude la iniciativa, nadie se escandaliza. Podría parecer que la literatura presenta limitaciones… ¿pero no es intervención (y bastante cara) la película basada en un cuento o una novela, con guiones que no se ajustan exactamente a la trama literaria? ¿O las imágenes que acompañan a un cuento ilustrado? ¿O la versión en tebeo (cómic) de aquellas Joyas Literarias de la Editorial Bruguera? Desde que descubrí la idea de intervenir cuentos he estado dando mente a intervenir mis propios engendros. No es lo mismo intervenir tu propia obra que permitir…
Voy a llamar castellano a lo que en el artículo que quiero comentar llaman español. Entiendo que para el extranjero nuestra lengua es el español, y entiendo que cualquier español sabe que nuestra lengua es el idioma de Castilla. Parece ser que el presidente Macron se ha dado cuenta (o alguien se lo ha dicho) de que el idioma va a convertirse en una gran baza económica. Perdida la batalla tecnológica y mercantil contra el inglés, el francés pugnará por ganar francófonos. El presidente Rajoy ha respondido que hará lo propio con el castellano (quizá su propuesta coincidiera en el tiempo con la del mesié). Ignoro qué son capaces de hacer en Francia. Pero conozco la mediocridad instalada entre los políticos españoles. Y tengo mis razones para desconfiar de nuestras Administra(i)ciones. De momento el presidente Rajoy tiene abandonada a la RAE, presupuestariamente hablando. Aunque ayer anduvo por el Premio Cervantes, que es donde estaban las fotos del día (y la presidenta Cifuentes). Perdido en sus guerras intestinas y en la batalla gubernamental por las cuotas de popularidad política, este presidente (cualquier presidente de la democracia ha sido peor que el anterior) será incapaz de jugar correctamente la gran baza del…
Leo con curiosidad los motivos de la elección del día 23 de abril como día internacional del libro. Me cuesta creer que para la fecha elegida pesara alguien más que Cervantes, el Inca Garcilaso de la Vega y el inglesito. Considero coincidencia el resto de decesos y nacimientos. Hemos hecho bien mitificando la figura de don Miguel. Ya he dicho en un artículo que me han publicado en República de las Letras que el castellano es el idioma literario por excelencia. No dudo de que otras nacionalidades querrían decir algo al respecto. Sobre manera los ingleses, históricamente celosos de cuanto se mueva en el orbe sin que ellos lo marisalseen. Ya que el inglés se ha consolidado como el idioma de la ciencia y de los mercados, deberíamos pelear por el castellano como idioma de la literatura (ellos lo están peleando). Haciendo una cata rigurosa nuestra literatura ha aportado al mundo más calidad que la anglosajona. Pero como en cuestiones de calidad acaban jugando arteramente números, ecuaciones y fórmulas, creo que además deberíamos dar un paso al frente. ¿Deberíamos? ¿Quiénes deberíamos? En nuestro país no existe la unanimidad. Si se trata de elegir entre dos colores, pongamos entre el blanco…
Estupor, incredulidad… Alienación, esperpento… Intereses bumerán, concesión torticera… Estos epítetos (y otros que asomaron y se fueron) han pasado por mi mente mientras leía la noticia: «Disney y el ministerio de Educación y Cultura se alían para animar a los niños a leer«. Y se me han introducido varias preguntas entre las sinapsis: ¿Por qué darle dinero español a una multinacional americana que no lo necesita para subsistir? El convenio obliga a Disney a realizar un anuncio de 20 segundos (duración estándar), a buen seguro pagado con dinero de todos los españoles. ¿Por qué no se informa a la ciudadanía de las contraprestaciones económicas que el gobierno de España va a conceder a la multinacional? La emisión de ese anuncio (¿por qué escriben y repiten spot?) sólo alcanza a los canales de la multinacional americana y por dos meses. ¿Cuántas veces se pasará al día?, ¿qué días?, ¿en qué franjas horarias? ¿Y por qué en estos dos meses concretos? ¿Qué gasto extra supone esto para la multinacional? ¿Qué gana la Disney con ello? ¿Es que dan duros a peseta? ¿De verdad alguien cree que el gusto por la lectura se logra con imágenes de personajes animados durante 20 segundos y…
Hace tiempo que no leo nada de Reverte. He dejado de leerle hace meses, cuando me pareció notar que este hombre había mutado en personaje, y que se produce como tal y no como un autor. Aunque cada cual está en su derecho de expresarse como le venga en gana, los personajes, aun tratándose del excelso don Quijote o de la eximia Lolita, son caricaturas de la realidad. Hoy he picado ante un titular que me invitaba a leer lo que Reverte (personaje o autor) dice de la autocensura, de moda a raíz de las nuevas tecnologías: «Pérez-Reverte: «La autocensura nos está tapando la boca»». ¿Y qué dice de este tema? Pues que la autocensura es culpa de los demás… ¡Vaya!, esto es nuevo en Reverte. En lugar de decir gallardamente que no tenemos cojones para enfrentarnos a grupos organizados que se producen agresivamente disparando infección desde un forúnculo de una red social, Reverte culpabiliza a los otros. Si algo es AUTO- a mí no me cabe duda de que la culpa es de uno mismo; maquillarlo no sirve de mucho. En una ocasión me regalaron un adagio: «No digas ‘me han hecho’; di ‘he dejado que me hagan’». Las…