Me voy a dar el capricho de escribir de forma pausada un artículo crítico con el Plan Nacional de Lectura 2017-2020. Te pido que desde tu pantalla tengas paciencia conmigo y que me sigas en mis disquisiciones. Si se te hacen pesadas, lee en diagonal hasta que encuentres la chicha que buscas… (…) Hace años, cuando a un ciudadano español le llegaba un documento estatal (carta, panfleto publicitario…) tenía la seguridad de que estaba ante una redacción impecable y una cuidada presentación; y de que el contenido tenía sustancia… La mierdocridad que vertebra esta sociedad da como resultado que, en los años que corren, y sin asomo de sonrojo, desde el Estado nos presenten redacciones lamentables, presentaciones pueriles e información vacía de contenido. También la Administración española se está yendo por el sumidero del retrete. Veo que la interfaz del Plan Nacional de Lectura , en la web institucional del Ministerio de Cultura, tiende a ser minimalista. Me parece bien que no se consuman recursos (adelanto que para lo que nos van a presentar, los fuegos de artificio hubieran tenido sabor a burla). Pero la presentación web es mejorable… ¿o es que por ser digital hay que contentarse con algo…
En este ciclo de análisis críticos a los dirigentes nacionales de la cultura le toca hoy al ministro José Guirao , un tipo serio, seco y «estirao». No se trata de hacer burla de los apellidos de las personas como si fuéramos guajes de instituto, pero es que ésa es exactamente la estampa que traslada José Guirao, una persona fría y distante. Lo cual me parece perfecto para dirigir cualquier ministerio, a no ser… A no ser que el tipo me siembre dudas después de diseccionar su entrevista. Recordemos que el almeriense Guirao llega al ministerio tras Maxim el Minim. De nuevo precipitación en las huestes de un gobierno que dijo llegar para ser provisional. Y Guirao, que aparentará ser todo lo frío que quiera, se deja datos que deberían ser reservados. Pero, ah, es que le han llamado de El Mundo y quiere ser majo. Para abrir la entrevista, el maquetador ha decidido resaltar en negrita una confesión devastadora en boca de un ministro de cultura. El hombre, cual chiquillo, celebra haber recibido 500 mensajes de esos instantáneos y 200 correos (que supongo que sean electrónicos). Pues empezamos bien si va a medir el éxito del nombramiento por 700…
Morimos el día que guardamos silencio ante la injusticia. Frase atribuida a: Ernesto «Che» Guevara Casi a mi pesar se ha pegado a mi mano, a modo de estilográfica, el bisturí que tanto se celebraba en mi desaparecido blog Aguja de Bitácora. Ese bisturí sólo puede empuñarse contra cargos públicos que no saben o no quieren hacer bien su cometido. Ya me han avisado de que al firmar con mi nombre me estoy cerrando puertas. Asumo el bloqueo. Pero me gustaría que otros aprendieran a protestar. La protesta puede venir del valor —cuando quien tiene algo puede perderlo, como un cargo, una subvención o una ilusión—, de la inconsciencia —cuando el que protesta ignora lo que puede llegar a no-conseguir—, o del hartazgo, cuando se protesta ante una situación insostenible. A mi juicio siempre hay que protestar mucho antes, para no llegar a situaciones imposibles. Pero bienvenida la protesta que surge del hartazgo: significa que alguien está aprendiendo a protestar. Es el caso de las bibliotecas asturianas. Los funcionarios sumisos dejan de serlo cuando ven que mes tras mes el perjudicado es el usuario, porque el usuario del servicio público es su propia familia y es él mismo. Se ha…
Otra de las noticias que había dejado guardadas este verano, es el nombramiento de Olvido García Valdés como directora general del Libro y Fomento de la Lectura (el 6 de julio de 2018). El título de este artículo debería dejar claro mi escepticismo. Vuelvo a coger aguja y bisturí (a la antigua usanza de Aguja de Bitácora) para diseccionar esta entrevista publicada el 4 de septiembre de 2018. No hay como las entrevistas para tomarle el pulso al personal. Aparecen querencias ocultas y derivas solapadas, pero hay que estar atento para que la prestidigitación de las palabras no nos confunda el intelecto. Antes de iniciar la vivisección quiero dejar un aviso a navegantes: mi descreimiento político es de tal envergadura que ni socialistos ni piperos deben ver en mi análisis motivos que les son propios. Por mí os pueden tirar a los tiburones a todos. Y a los que militáis en otras siglas también, no vayáis a confundiros con mi actitud cáustica e irreverente. La política es la religión seglar por excelencia. Allá cada cual con los credos que le lastran la mente. Lo primero que salta a la vista en esta entrevista es la foto de la señora Olvido….
El final del verano llegó… Y a los sones de esta añorada canción del Dúo Dinámico quiero volver sobre algunas noticias que había dejado durante las vacaciones en mi bloc de notas. La primera, el nombramiento del poeta Luis García Montero como director del Instituto Cervantes. Ya he hablado en otro momento de la incapacidad del presidente del gobierno… Un momento, que no me acordaba de que en mitad del verano hemos cambiado de presidente. En mi ignara opinión, cualquier presidente de la democracia ha sido peor que el anterior. Y este ‘primo del Zumosol’ va a continuar con la tónica general. No te equivoques conmigo, amigo lector, que no tiñe la tinta de mi pluma el color de ningún partido. Allá tú si dejas palpitar tu almeja (diminutivo de alma) al son de unas siglas. Estás en tu derecho. Pero permite que yo sea escéptico y crítico hasta la causticidad y la irreverencia (sin llegar al insulto). Convendrás en que estoy también en mi derecho. Decía antes de la digresión que había dejado dicho que el presidente del gobierno sería incapaz de rentabilizar la ventaja del castellano como generador de riqueza. Hemos cambiado de presidente y yo mantengo lo…