Greguecuentos 7

5 de diciembre de 2019

Paseo vespertino
Paseaba por el monte cuando le cayó encima el peso de la noche; al levantar la mañana la escarcha había respetado el cadáver aplastado.

 

Sin desasnar
Estaba seguro de que amor propio era hacerse pajas… y de que un auto sacramental era el coche del obispo.

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